domingo, 15 de abril de 2012

Diario

8-Abril-1912
Es la primera vez que veo a alguien así, tan diferente a los demás, sobre todo por esa sonrisa suave dibujada en su rostro, diferente a la arrogante que los otros poseen, hoy lo he visto al salir a cubierta, sus ojos tenues destellaron con el brillo del sol al secar su frente, llevaba un overol y una chaqueta caqui, es de segunda clase, lo sé, quizá tercera, pero eso no importa, con mirar su rostro un segundo he visto más fortuna de lo que he visto en toda mi vida aristócrata, me pregunto si lo volveré a ver.

10-Abril-1912
Hoy lo he visto de nuevo, salí a la cubierta a tomar un poco el fresco del mar, el sol irradiaba en el cielo emitiendo una ola de calor, me recargue en uno de los barandales y lo vi, casi junto a mí, sentado en una de las bancas viendo hacia donde yo estaba, llevaba una libreta en la mano y pluma, nuestros ojos se cruzaron por un leve momento y bajo la sensación fugaz de calidez me sonroje y gire otra vez a mi posición. Debí hablarle primero, pero fue él quien se acerco.

12-Abril-1912
Jamás me había divertido tanto con alguien, él es sensible y simpático, habla con suavidad a pesar de verse un poco rudo, su rostro es cuadrado y de facciones duras parece un poco amenazante, pero la realidad es otra, es… ¡¡¡tan tierno!!! Me ha leído un poema escrito por él “Y en tus ojos me perdí a la belleza de tu ser” Rezaba la ultima parte. Lo veré mañana de nuevo, no puedo esperar, en la noche lo llevaré al comedor y quizá bailemos un poco.

14-Abril-1912
Creo que moriré, él me ha dado un beso en la mano al dejarme en la puerta de mi habitación y se ha ido, llevarlo a conocer “mi mundo” ha sido lo peor, no me perdonará por lo ocurrido esta noche y…
Una alarma sonó hace poco, nos retienen a todos en nuestras habitaciones, alguien gritó que chocamos contra un iceberg, no podemos hundirnos, este barco es inhundible dijeron orgullosos sus constructores, “Ni Dios podría hundirlo” Fue la frase exacta. Alguien toca creo que…
Lenny entró a mi habitación, me abrazó fuertemente y beso mi frente, salimos juntos de ahí, su voz es acelerada, creo que es verdad, dice que yo puedo salvarme, pero vivir sin él…
Estamos sentados en la banca de la cubierta donde nos conocimos, la gente histérica se empuja hacia los botes salvavidas, no son suficientes para todos, una señora tiene a una niña llorando abrazada contra su cuerpo, ellas tampoco se salvarán, algunos hombres desesperados se lanzan por la borda, el frio del mar los matará, se escucha el suave sonido de una melodía a lo lejos, es una buena forma de pasar tus últimos minutos de vida…
Un último beso que no será dado, un último abrazo que no ocurrirá, solo mi mano tomará su mano hasta el final, es probable que nadie jamás lea esto, es probable que se deshaga en el mar lo escrito aquí, pero el barco será succionado y moriremos así que estos son los últimos segundos que me quedan para expresarme, pero eso no tiene importancia, él está junto a mí, y sé que, a pesar de morir hoy, podré tomar su mano y quedarme junto a él por toda la eternidad…